La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) deploró este viernes la ausencia de Nicaragua en una audiencia sobre la situación de derechos humanos en ese país celebrada en Santo Domingo.
"La CIDH lamenta profundamente la ausencia del Estado de Nicaragua en la audiencia a la que fue convocado", señaló el organismo en un resumen de su 168° período de sesiones, que concluyó este viernes en la capital dominicana.
Managua decidió marginarse en medio de una controversia con la CIDH, que quiere investigar las 49 muertes ocurridas en las recientes protestas contra el gobierno del presidente Daniel Ortega.
"La ausencia de las delegaciones (...) impide o dificulta severamente el trabajo de la CIDH", añadió la declaración, indicando que las audiencias son una "herramienta esencial" para cumplir con su mandato de defender las garantías fundamentales.
Pero poco después este viernes, Ortega aceptó las condiciones de los obispos nicaragüenses para iniciar un dialogo nacional, entre ellas el cese de la represión y el ingreso al país de la CIDH, a la cual se negaba.
"Estamos de acuerdo en trabajar cada uno de los puntos allí planteados (por los obispos), tomando en cuenta que en todos se recoge su buena voluntad como mediadores y testigos", respondió el mandatario en una misiva dirigida a la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN).
Para el ente con sede en Washington, su visita a Nicaragua es "de la mayor importancia" ante "los cuestionamientos presentados por la sociedad civil sobre la independencia y autonomía de la Comisión de Verdad, Justicia y Paz", creada para investigar las muertes en las protestas.
"Es indispensable que podamos sostener reuniones con autoridades, pero también con diversos sectores de la sociedad civil, para poder hacer una evaluación y un diagnóstico serio, y poder de esa manera considerar la pertinencia de prestar el asesoramiento técnico", señaló la comisionada Urrejola Noguera, citada en el comunicado.